Mientras la muerte cae ante mi...

Hoy siento que no habrán poemas, ni parábolas, solo palabras para expresar lo que hasta el momento he tenido. Han pasado varias cosas en mi vida que podrían ser consideradas peligrosas, y hasta en algún momento, desafiantes y tristes, que te hacen valorar la vida. Pero, hoy es uno de esos días en los cuales prefería no ser yo, quizás, esconderme de la verdad... Vi morir a alguien hoy, y si mi padre podría ser el siguiente...

No puede haber peor momento, no pude haber estado en el peor lugar, pero es mi deber, como hija, y como mujer, acompañar al ser que me dio la vida, que esta sufriendo en estos momentos, por causa de una aflicción al corazón. La impotencia, el sentimiento de rabia, de desesperación me invaden a cada momento.. no puedo dejar de pensar en un solo momento por lo que tuve que ver hoy, en esa sala, mientras que a un par de metros, una persona se moría por los mismos motivos. Se escuchaban sollozos, gritos y lamentos.. era todo en cámara lenta, ya que todo podía ser visto; lo unico que pude hacer es dejar que estas lagrimas caigan mientras se gritaba 'hagan algo, por favor..' era impotencia el sentimiento que hacían caer las lagrimas, quizás sabiendo que podría pasar algo asi a mi padre sin que yo este ahí.. y perderlo para siempre... Y así como estas lagrimas siguen cayendo ahora sin parar, escondidas entre una falsa tranquilidad a él... No es lo mismo sentir que yo me desvanezco de este mundo a que sea al ser que mas adoro.

Todo fue tan rápido. Todo fue tan violento. Una vida se va sin gloria en este mundo; todo se desvanece a su paso, sin contemplación de nada... El dolor se acompañaba entre miradas atónitas de la pésima degradación de los doctores hacia el paciente que, por ser atendido en un hospital estatal, suele ser mejor dejar morir a un paciente que salvarle la vida.

Se puede hacer una analogía de esto con una canción de Juan Luis Guerra:

... no me digan que los médicos se fueron...
no me digan que no tienen anestesia,
que los rayos X se fundieron,
y que el hilo de coser, fue bordado en un mantel

no me digan que las pinzas se perdieron,
que el estetoscopio esta de fiesta,
que todo el alcohol se lo bebieron,
y que el suero ya se uso para endulzar el café...........



Pues, estos versos caen justamente a la descripción, quizás aun más podría decirse sobre todos ellos.
Pero ya no importa. Seguiremos luchando. Así, aunque no tenga que dormir por las noches, así, aunque tenga que estar de pie, ante la lluvia o cualquier elemento que caiga del cielo... Yo aun así estaré ahí, porque lo único que quiero, es que mi padre, salga con vida de ese suplicio...

Esto se lo dedico a el, que esta en el hospital, que se que no podre verlo aquí por mucho tiempo, mientras mi madre lo cuida y yo trato de estar ahí lo que mas se pueda. Aunque estas lagrimas no paran de salir, tendré que guardarlas para después... para ser fuerte y soportar esta carga juntos.

Te quiero, papa. No te vayas lejos de mi. Aun quiero que sigas en este mundo, a mi lado.

En que asuntos esta elucubrando ese camino...

ahh... la noche.. y el susurro del viento que toca la poca tranquilidad que emana el tráfico de la ciudad. La majestuosidad de las luces que emergen cuando el sol cae y que revela todo lo misterioso que tienen esos callejones en penumbra que son apreciados a lo lejos.

La calma llena la vida y la estrena en nuevos horizontes.. que fresco se siente todo, todo por primera vez! Aunque todo es sinónimo de locura infernal, si vemos en el retroceso del tiempo, cuando el sol comienza a despertar cada mañana, es un respiro poder apreciar el color de azules grisáseos a traves del cielo mientras se siente un ambiente de ambiguedad en los rostros que se ve pasar.

Pues, todo llega a ese punto, en el cual descubres que lo que realmente importa es moverse a través de ese ambiente, porque sabes a donde debes de ir, y a donde debes de regresar. Cada melodía que suena en el viento canta el ritmo de todos los días, lo cual he llegado a apreciar.

Ya no hay historias tristes que contar, no hay parábolas que mencionar ni lugares a donde esconderse; valorar cada una de las cosas que se hace en esas horas que se siente el calor del sol, hace que todo lo demás desaparezca. Dedicar lo que realmente importa a ese mundo que da vueltas sin cesar, a ese espacio que denominas al fin tuyo, permite que el horizonte que veía a lo lejos, se sienta tan cerca.. pero tan cerca.. que apenas logro estirar mis manos puedo tocar el borde..

Sin embargo, mirando detenidamente, siempre existirá algo que no agrada, que no toca claramente algún sentimiento de confianza, que deja perplejo al más incredulo. No es algo que no se haya visto ya; no he escapado de esas frialdades, pero solo logro reirme, pensando en lo poco que pueda llegar a formar parte de mi día a día, ya que es algo que se ve pasar, se ignora y se va.

La batalla interna de los recuerdos

Las añoranzas del pasado,
lo hermoso de lo prohibido,
lo que se ha escondido y se ha perdido
que no deja el tiempo
pero sí los pensamientos

Lo que no se perdió,
se enmudeció entre los sollozos
entre los muros que rodean a la mente
que, traicionera de su propio camino
voltea a su costado, buscando...

Soñando en aquellos tiempos,
batallando aquellos momentos,
callando muchas caídas
que perpretaron muchas huídas
y donde sólo se supo contener mi ira

Adonde irán a parar
las voces vacías esta noche
donde quedarán
aquellas estrategias que serían
las que salvarían poco a poco
la poca cordura que me queda

que existe entre ese sueño
y mis propias ansias de aquel
nadie más entenderá lo que siento
que es lo que más oculto dentro de mi
que sólo suele crecer dentro de si

Ambos sabemos ya que todo esta perdido
que todo quedo en el olvido
¿qué es esto? Es sólo un simple recuerdo
que se ha perdido nuevamente en ti y en mi
que sólo ha creado en mi... abismos y espejismos...