La meditación y el encanto...

... Y he alli... el futuro que se cierne entre los dedos... entre lo que uno esta dispuesto a dar por lo que tiene, por lo que cree, por lo que sobrevive. He aqui la prueba feaciente que todo lo que comienza mal, termina peor. He visto nacimientos, comienzos de muchos eventos, de la vida y de sus haberes. Pero nunca crei poderme sentir tan sorprendida de lo que se crea de mala manera y creer que lo que se ha formado, tendra la forma adecuada a los ojos de la sociedad.

Mal formado, engendro, ente oculto.

Nombrenlo como sea, pero he ahi, la desfachatez de la cordura, del raciocinio, de lo que deberia ser considerado 'prohibido' de hablar en las mesas a la hora de la comida. Pues si, es algo que no llego a comprender y que me desvia de la razon. Los que me habran escuchado estos ultimos dias, han de entender mi pesar. Aunque solo creo que lo he mencionado una vez este dia, para no malgastar palabras que son lanzadas al espacio, del cual no se pueden recuperar.

Algo si me queda en claro; mi mente se nubló en algún momento por la inseguridad y la incomprensión, pero esto me delimita mis próximas metas. Este desafio se lo dedico a esos cuantos que, creen que por tener un nombre, pueden revolucionar. Que solo por tener un puesto comprado pueden llegar alto; que demostrando que escudandose del antiguo monstruo devora-cabezas podrá pasar por alto el juicio que deberá de enfrentar.

Lanzaré al aire esta meditación, y del cual espero que el encanto que tienen no les dure tanto, que sólo sean como los rumores que vienen como las copias borrosas que muestran temáticas en decadencia y el llanto de muchos por banalidades de nuestro propio destino.

El hecho de estar viva...

Este es el transcurso de la juventud, que huye entre mis pensamientos y se plasma en una hoja blanca, con pequeños dibujos y trazos de eterna lucidez, o eterna locura. Es más, se la ve que se burla de lo que ha pasado y comienza a desdibujar lo anteriormente hecho, pensando en seguir jugando a escondidas y haciendo travesuras.

Lo único que me divierte mientras sigo dibujando con mis pies el camino a través de las hojas que caen de los árboles cada mañana.

Suelo abrir con confianza los brazos para encontrarme con mi vida, con mis hechos y deshechos, mi risa y mi desdicha, mis llantos y lamentos, mis logros y mis caidas. A veces pienso que lo puedo dibujar todo, lo represento todo a base de muchos símbolos, como estos. Y aunque no diga mucho y mencione bastante, es solo el esperar que en algun momento he de cerrar con el capítulo final, que debe de ser tan trascendental que el primero, o tan controversial como los siguientes, tan contundentes como los que vienen y tan tristes como los que precedan al último en llegar.